
“`LA RAJADA´ DE BENÍTEZ”
“Eso se dice cuando se está dentro…” (Pablo Lasso. DT R. Madrid) Buena la armó Rafa Benítez, ex entrenador del Real Madrid C.F. aprovechando la transmisión de “Champions League” (A.S. Roma vrs R. Madrid C.F.) en una televisora inglesa. No se guardó nada el destituido técnico del club “merengue”. Disparó dardos dirigidos al hígado del jerarca madridista (Florentino Pérez) En todo caso, lo que dijo no es ningún secreto, ya que casi todo lo que sucede entre bastidores en el vestuario madridista y oficinas es ampliamente difundido.
Señaló e hizo énfasis en las intromisiones del Presidente en las decisiones técnicas a tomar y, sobre todo, en la cercanía sospechosa con “los capitanes”, que a final de cuentas se convierten en “sus orejas”. Eso no lo dijo pero…
En todo caso, los hechos han dado la razón a las especulaciones. Al entrenador madrileño, por más que se niegue, “le hicieron la cama” los jugadores, por la metodología y, sobre todo, su carencia de “mano izquierda” y permisibilidad, que siempre exigen “los cracks”, que no en vano tienen más peso dentro del club y con la afición, que el inquilino circunstancial del banquillo del Bernabéu.
El “efecto Zidane” de momento ha dado sus frutos. Las declaraciones de los futbolistas desnudan la mala relación que existía con Benítez. Lo hacen entre líneas, cuando unos y otros (titulares y suplentes) se explayan diciendo que “la comunicación con `Zizou´ es más fluida” y que además el francés `les motiva mucho´”. En todo caso, los resultados exigidos aún están lejos. No es ganar al Granada, golear a un Rayo Vallecano diezmado, ni tampoco obtener la victoria ante la A.S. Roma, no. Se trata de obtener títulos y de momento “los blancos” solo aspiran a la Liga (está muy difícil) o a ganar “la undécima” (“Champions League”).
Y mientras los de Concha Espina transitan en las dos competencias, “la rajada” de Rafa Benítez solo ha servido para que “le lluevan” al ex Míster. Todos le han señalado: ¿Por qué no lo dijo cuando estaba dentro?, conclusión ésta a la que llegan periodistas, aficionados e incluso técnicos.(Pablo Lasso es del basket)
Por tanto, a Benítez ahora le suman al fracaso como entrenador del equipo de Concha Espina, su falta de valor para decir las cosas de frente y el pésimo estilo que se atribuye a quién no da la cara o lo hace a toro pasado. ¿Ya para qué?